Itaembé Miní Oeste y Villa Cabello entre las zonas con más criaderos de Aedes
En Posadas, el último LIRAa mostró varios puntos en rojo por el alto porcentaje de larvas y pupas del mosquito transmisor del dengue. Más del 12% de los recipientes tenían reservorios.
La Municipalidad de Posadas compartió los datos del último Levantamiento Rápido de Índice de Aedes aegypti (LIRAa), que en la edición número 33 recorrió los barrios para medir la presencia de reservorios del mosquito transmisor del dengue. Teniendo en cuenta el Índice de Vivienda (IV) y el Índice de Breteau (IB) -que mide la cantidad de recipientes con presencia positiva por cada 100 viviendas- en promedio más del 12% de los recipientes con agua en las viviendas tenían larvas o pupas del mosquito.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN la secretaria de Salud, Ambiente y Desarrollo Humano de la Municipalidad Posadas, Lilian Tartaglino, explicó que “se visitaron 12.209 viviendas, de esas se pudo ingresar de manera efectiva a 6.239”. Para este relevamiento, “hubo una división de la ciudad en 12 estratos o zonas geográficas y se establece un porcentaje de viviendas a visitar. Fue así que pudimos detectar un promedio de un 12,75% con reservorios con un máximo de 18,4% y un mínimo de 4,33%”.
El equipo que trabajó en terreno detectó que “en estos reservorios, la mayoría eran depósitos móviles como masetas, floreros, plantas acuáticas, recipientes plásticos o de vidrio, bebedores de animales, objetos ornamentales”, agregó.
Tartaglino detalló que “elaboramos un mapa para dividir el nivel de riesgo, donde la zona en rojo se dio en la parte costera, en zonas como Tiro Federal, Itaembé Miní Oeste y Villa Cabello; la naranja es el área de Santa Rita, Itaembé Miní. En verde, dio en la zona sur-oeste de la ciudad y la zona centro, que también se mantiene bajo el número de reservorios”.
Desde el control sanitario, remarcó que “sabiendo que es un mosquito domiciliario, es necesario el compromiso de la comunidad para que las personas sepan que deben eliminar los reservorios. En la parte del borde del agua es donde el mosquito pone sus huevos, que luego pasan a ser larvas y nuevos mosquitos. En este sentido, como vecino, las acciones que tomen repercuten en varios metros en la redonda”.
La secretaria de Salud recordó además que “por la pandemia, el año pasado los relevamientos fueron más pequeños. En general, los depósitos han cambiado porque antes se encontraban en los que eran de grandes volúmenes y residuos sólidos urbanos, cuando ahora están en reservorios pequeños dentro de los domicilios”.
Fuente PRIMERA EDICIÓN
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