“Ya está saliendo..”: Una operadora del 911 presenció un parto por teléfono
Una operadora del número de emergencias nacionales asistió a una pareja por teléfono y los guió para que dieran a luz, mientras esperaban a la ambulancia. El parto duró 12 minutos.
“Ya esta saliendo..”: Una operadora de 911 presenció un parto por teléfono
La jornada laboral empezó de manera rutinaria para la operadora del número de emergencia nacional (911), Brenda Armenta. Sonó el teléfono a las 20:48, contestó y del otro lado una voz angustiada le pidió un servicio de ambulancias para su esposa que estaba a punto de parir. La historia hubiera terminado ahí si Andrés García Bautista, el futuro padre, no la hubiera retenido por teléfono. Se lo escuchaba desesperado: su esposa tenía fuertes contracciones y ya había roto fuente.
Fue entonces cuando Brenda Armenta se puso en acción y, mientras esperaban la llegada de la ambulancia, guió al hombre para que asistiera a la mujer, María Guadalupe Méndez Figueroa, en la labor departo. El hecho ocurrió en la ciudad de San Luis Río Colorado, México, donde la conversación telefónica se desarrolló de la siguiente manera:
Operadora: Pon el teléfono en altavoz y trata de que cuando salga el bebé caiga en la toalla. Que ella siga pujando, por favor.
Padre: ¡Ya está saliendo, doctora!
Operadora: Que no grite, que puje, que siga pujando, dile. ¿Ya va saliendo el bebé?
Padre: Ya salió doctora.
Operadora: ¿Ya salió todo? Ok. Trata de cubrirlo con la toalla, por favor, trata de cubrirlo con la toalla. ¿Tu esposa se encuentra bien?
Padre: Sí.
Operadora: Ok, si puedes, acercárselo a ella.
Padre: ¿Se lo doy a ella?
Operadora: Sí, si ella puede sostener al bebé. ¿El bebé está respirando bien?
Padre: Sí.
El parto duró exactamente 12 minutos y el bebé nació a las 21 en punto. En cuanto llegó la ambulancia, los padres fueron trasladados al hospital donde, horas más tarde, se acercó Brenda Armenta para visitar al matrimonio y conocer al bebé al que había ayudado a nacer.
La gobernadora del partido donde se encuentra la ciudad de San Luis Río Colorado, Claudia Pavlovich, se enteró de lo sucedido y la llamó por video para felicitarla por su labor y por su actitud a la hora de asistir un parto.
La jornada laboral empezó de manera rutinaria para la operadora del número de emergencia nacional (911), Brenda Armenta. Sonó el teléfono a las 20:48, contestó y del otro lado una voz angustiada le pidió un servicio de ambulancias para su esposa que estaba a punto de parir. La historia hubiera terminado ahí si Andrés García Bautista, el futuro padre, no la hubiera retenido por teléfono. Se lo escuchaba desesperado: su esposa tenía fuertes contracciones y ya había roto fuente.
Fue entonces cuando Brenda Armenta se puso en acción y, mientras esperaban la llegada de la ambulancia, guió al hombre para que asistiera a la mujer, María Guadalupe Méndez Figueroa, en la labor departo. El hecho ocurrió en la ciudad de San Luis Río Colorado, México, donde la conversación telefónica se desarrolló de la siguiente manera:
Operadora: Pon el teléfono en altavoz y trata de que cuando salga el bebé caiga en la toalla. Que ella siga pujando, por favor.
Padre: ¡Ya está saliendo, doctora!
Operadora: Que no grite, que puje, que siga pujando, dile. ¿Ya va saliendo el bebé?
Padre: Ya salió doctora.
Operadora: ¿Ya salió todo? Ok. Trata de cubrirlo con la toalla, por favor, trata de cubrirlo con la toalla. ¿Tu esposa se encuentra bien?
Padre: Sí.
Operadora: Ok, si puedes, acercárselo a ella.
Padre: ¿Se lo doy a ella?
Operadora: Sí, si ella puede sostener al bebé. ¿El bebé está respirando bien?
Padre: Sí.
El parto duró exactamente 12 minutos y el bebé nació a las 21 en punto. En cuanto llegó la ambulancia, los padres fueron trasladados al hospital donde, horas más tarde, se acercó Brenda Armenta para visitar al matrimonio y conocer al bebé al que había ayudado a nacer.
La gobernadora del partido donde se encuentra la ciudad de San Luis Río Colorado, Claudia Pavlovich, se enteró de lo sucedido y la llamó por video para felicitarla por su labor y por su actitud a la hora de asistir un parto.
Fuente Infobae
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